domingo, 10 de enero de 2010

A LO MEJOR NOS LO MERECEMOS

No aprenderemos nunca. Parece que es innato a nosotros el tener un determinado comportamiento que ni tan solo por dignidad somos capaces de reconsiderar.
Tengo por costumbre escuchar una tertulia cada noche en una emisora de radio, pues bien, ayer cuando leían los titulares de los periódicos europeos se me caía la cara de vergüenza. No por que se mofaran de España, con más o menos razón, sino por los comentarios de los contertulios anoche invitados. Sabiendo la que nos iba a caer luego, tuvieron los santos pantalones de estar 15 minutos discutiendo sobre la idoneidad o no del atuendo de la Chacón en la Pascua militar. Que tema más interesante. Imagino que es culpa de todos que en otros países pongan en tela de juicio nuestra capacidad de liderar algún proyecto en Europa, que nuestra fama nos la hemos ganado a pulso por que así nos luce el pelo. Hemos tenido pocas intervenciones afortunadas, como por ejemplo decir que vamos a mejorar el paro en Europa, pero si parece un chiste…A pesar de todo, ya está bien de que se nos tiren al cuello impunemente y nuestros periodistas se peleen entre ellos por si es mejor una falda o un pantalón. Indignante. La mayoría de la gente sabía que las campanadas las daba la Esteban pero no que asumíamos la presidencia de turno de la UE, además de a la falta de interés habría que sumar la falta de información y la constante programación basura con que nos inundan la tele. Aún así, negándome a verla, es imposible no estar al tanto de las últimas novedades de la susodicha por que la meten hasta en los telediarios. Muchas veces he sentido vergüenza ante algunos comportamientos o intervenciones pero no por ello aplaudo que el resto se burle, aunque lo tengamos merecido. Ahí entramos todos dentro del mismo saco. Aplaudo en cambio, la iniciativa del presidente Rodríguez de convocar una reunión con algunas personas que pueden serle útiles para la nueva etapa. Creo que no estaban todos los que son y tampoco son todos los que estaban, aún así el hecho es lo que cuenta y espero que vuelva a repetirse. De todas maneras no deja de chocarme la presencia de Solbes. Hace unos meses se le destituía como vicepresidente económico y ahora ¿se le llama para que asesore sobre el mismo tema? Algo realmente se me escapa, si antes fue tan malo malísimo ahora de golpe no puede ser tan bueno buenísimo. He de confesar que siempre me pareció injusto su cese, que se había confiado en el para gestionar las cuentas del Estado y no se le dejó actuar como el creía. No sé si esto es incoherencia pero a mí me lo parece. Sólo me gustaría que llegara el día en que pudiera decir que soy española sin sentir vergüenza.

1 comentario:

  1. Se dice que los hijos son el reflejo de los padres, cosa que para mi no esta muy clara, extrapolando a nuestra sociedad tampoco tengo claro si, nosotros somos el reflejo de nuestros políticos, periodistas etc. o ellos son el reflejo de nuestra imagen.
    Lo que si tengo claro es que la información que se nos da a través de los medios (todos) es interesada, deforme, alineante y manipuladora, interesa una sociedad amorfa, donde la preocupación más inmediata sea la más morbosa y también, en la que se da referente a los temas políticos. Las facultades de periodismo tendrían que replantearse que clase de informadores salen de sus aulas.
    Referente a los políticos, mas de lo mismo, mientras piensen que el fin justifica los medios y que para triunfar hay que ser guapo, mal lo tenemos, deberían de leer a Albert Camus (Premio Nobel de Literatura 1957) y menos a Maquiavelo que una vez escribió, desde hace un tiempo a esta parte, yo no digo nunca lo que creo, ni creo nunca lo que digo, y si se me escapa alguna verdad de vez en cuando, la escondo entre tantas mentiras, que es difícil reconocerla”.
    El resto de políticos o periodistas occidentales son iguales que los nuestros, vergüenza, si, pero de esta sociedad.

    Rafa Martínez.

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