DERECHO A LA INFORMACIÓN

Antes de entrar en tema, quiero agradecer y pedir disculpas a todos aquellos que me habéis escrito durante estas semanas de parón “bloguero” solicitándome, y en algunos casos exigiéndome, la publicación semanal en el blog. Lejos de molestarme, supone para mi un honor la expectativa creada y como siempre ha sido costumbre, a partir de ahora, volveré a publicar, como mínimo una vez a la semana. El motivo del silencio no ha sido que no hubiera temas, ni mucho menos. En realidad se ha tratado de una falta de tiempo, ya que los esfuerzos estaban centrados en otro sitio.
Ahora el tema del que escribir es más que evidente y es el que ahora mismo está en las calles de la Llagosta y en el que hemos estado trabajando desde hace muchos días.
Por fin tenemos sentencia en el caso Valentine. Un proceso que oficialmente tuvo su inicio el 27 de febrero de 2004, fecha en la que el Pleno celebrado en el Ayuntamiento de Montcada, aprobó la modificación del Plan General Metropolitano (P.G.M.) en Can Milans. Cinco años después, el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya ha dictado sentencia a favor del Ayuntamiento de la Llagosta. Esta sentencia supone dar la razón a todas aquellas entidades y personas individuales de la Llagosta que mostraron su indignación y desacuerdo frente al, ahora consumado, intento del Ayuntamiento de Montcada de recalificar una zona verde, de uso y disfrute de los llagostenses, en suelo industrial y construir una fábrica que además de todos los inconvenientes, supera la altura máxima permitida de 15m del P.G.M., tal y como se describe en el peritaje urbanístico mencionado en la sentencia.
En una entrevista realizada al alcalde de Montcada, el señor César Arrizabalaga, y publicada en un diario el día 19 de septiembre de 2006 se congratulaba de que dentro del proyecto en el que se contemplaba el cambio de ubicación de la empresa Valentine “la participación ciudadana es uno de los puntos clave”. Ahora es a nosotros a quienes nos toca congratularnos y felicitar a las 34 entidades y personas individuales que formaron la Plataforma de defensa de la zona verde de Can Milans y a todos aquellos que con sus firmas contribuyeron a la propuesta.
Este resultado es el fruto de la lucha popular de un pueblo, el de la Llagosta.
Ahora, con esta sentencia en las manos, no se entiende la actuación del equipo de gobierno socialista de la Llagosta, ocultando durante tres meses la noticia. Cabe recordar que no han sido ellos los que la han hecho pública, no habiéndose pronunciado aún al respecto, así que nunca sabremos cuanto tiempo más habrían estado callados. ¿Por qué no informar a la población? Sólo ellos lo saben. Nada, nada, puede justificar el motivo del silencio. Pocas cosas han pasado en la Llagosta con esta magnitud de importancia y revelantes para todo el pueblo...y se trata de una muy buena noticia. Ahora, debemos pensar todos y empezar un nuevo proceso de participación ciudadana continuista con la plataforma pero ahora defendiendo lo que tanto habíamos proclamado. Una vez más el empeño de un pueblo consigue su objetivo, a pesar de que a algunos parece no haberles gustado. Desde aquí será un placer informar de todos los pasos, actividades y decisiones (espero que participativas) que en este sentido se tomen.