PATENTE DE CORSO

38 días de privación de la libertad. 38 días de secuestro, encerrados en su lugar de trabajo a voluntad de unos mercenarios. En aguas lejanas a España pero en territorio español ya que se encuentran a bordo de un barco con esa bandera.
Cuanto distan estos corsarios de ser pobres gentes que luchan por necesidad.
Sus negociadores se encuentran en algunos de los mejores y más afamados bufetes de Londres. Algo que la mayoría de nosotros no podríamos ni imaginar poder pagar en toda la vida.
Hay muchas cosas que no entiendo. Seguramente tengan una razón de ser y son así por algún motivo, pero aún nadie ha sabido explicarme cual es, y estoy abierta a todo tipo de debate. Una de estas cosas que se me escapan son las competencias del Ministerio de Defensa. Imagino, por que no lo sé, que la ministra debe estar asesorada por un buen equipo de expertos y profesionales que sí sepan lo que se hacen y tengan claro como actuar frente a este tipo de situaciones. Me gustaría que en este país hubiera la suficiente libertad como para que todos pudiéramos conocer la opinión de la gente que realmente sabe tratar el tema. Qué opina el JEMAD y que opciones plantea. Opino que el ministerio de Defensa es suficientemente serio e importante y debería estar en manos de alguien con experiencia y capacidad de decisión. Y no por que sea mujer, lo cual no es ni siquiera debatible, en otros países, primeras potencias mundiales, ya ha habido mujeres desempeñando estos cargos y nadie les ha podido poner un pero. Pero claro, los presidentes eran otros.
Mientras el presidente Rodríguez y la Vicepresidenta de la Vega, están de viajes preparando la presidencia europea de España durante el primer semestre del año próximo. Y cuando son preguntados respecto al tema, lo único que responden es que todos tranquilos que la situación está controlada....ahora habría que preguntarle a ella que entiende por controlada. Quizá la definición de controlada sea que los pescadores estén siendo día tras día humillados, hacinados, sin comida y sin bebida...
Tenemos dos fragatas españolas, la Canarias y la Méndez Núñez así como helicópteros custodiando el barco y con todo y con eso aquello parecen las Ramblas. Ahora sacan tres marineros, ahora los vuelven a llevar al barco. Ahora sube un pirata, ahora baja el otro.
Quizá la solución sería fácil si todos, políticos, periodistas (sobretodo) y gente de a pie, hiciéramos piña sobre las decisiones que se llevaran a cabo para acabar con el sufrimiento de estas personas que de lo único que son culpables es de realizar su trabajo.
Que se aceptara tal cual la decisión que el gobierno planteara. Todo con tal de que la historia tenga un final feliz.
Que mal acierto es llamar piratas a los secuestradores. Estos no tienen ni códigos de honor ni valor. Son unos simples sinvergüenzas que han visto el camino fácil de conseguir dinero a costa del chantaje por la vida.
Hoy termina el plazo dado por los captores. Esperemos que la solución venga pronto y que sea de la mejor manera posible. Mientras desde aquí, lo único que podemos hacer, no es dar ánimos a las familias (que también), por que eso no va a acabar con el problema, es decir basta ya y empujar a que quien debe tomar la decisión que sea, que lo haga, que se enteren de que algunos conciudadanos están luchando por su vida. Decir que basta ya de hacernos pasar vergüenza ante la impasibilidad frente a la situación y la tontería de mayorías de edad o no. Nada de eso los va a traer a casa.