sábado, 27 de marzo de 2010

NO PODÍA SER DE OTRA MANERA

Que se escapan cuatro tigres de un zoológico en Canarias. Que evidentemente hay que atraparlos antes de que puedan hacer daño a alguien. Que los cuidadores no tienen dardos tranquilizantes. Que avisan a los agentes del SEPRONA (literalmente y sin ningún cinismo, acrónimo de “SERVICIO DE PROTECCIÓN A LA NATURALEZA”). Qué estos tampoco tienen dardos tranquilizantes, todo y que ya sabían cuál era su misión cuando acudieron. Pues “sólo” queda una solución. MATARLOS. A tiro limpio, sin piedad, como si estuvieran realizando unas prácticas militares. Realizaron más de cuatrocientos disparos, así que o los rifles estaban torcidos o su puntería dejaba mucho que desear.
Vergonzoso es que, a medida que se ha tenido más información sobre el suceso, se ha podido saber que los animales nunca llegaron a salir del recinto del parque. Que este estaba cerrado al público y que los animales habían nacido en cautividad lo que les confiere menos ferocidad de la que en un principio habría que asumirle a los de su especie.
Resulta curioso que fuera la propia propietaria del parque la que aconsejara abatirlos, a pesar de que los animales estaban volviendo a su jaula, de hecho uno de ellos consiguió volver…Qué mierda de situación. Lo siento pero me consume la rabia de que siempre quedemos ante los ojos del mundo de la misma manera, como unos involucionados incapaces de entender nada que no sea nosotros mismos. ¿Es que a nadie le extraña? A veces creo que las viñetas de “historias de la puta mili” reflejaban una situación más real de lo que nunca habríamos querido.
Este tipo de cosas en este país se resuelven siempre de la misma manera. Que se escapa un toro, pues lo matamos. Que nos molestan las palomas, pues las envenenamos. Que me molesta un árbol, pues lo corto. Y así hasta el infinito.
Espero realmente que quien tiene la autoridad realice una investigación a fondo y se aclare por que los propietarios del parque no estaban preparados para una situación así, que interés podían tener en querer matar a los animales y que si no se aclara la situación, les retiren la autorización de tener el parque y se lo concedan a alguien consecuente y responsable. Pero a lo mejor el matar a esos tres animales no es lo suficientemente importante como para que alguien “pierda” un poco de su tiempo.
De momento el planeta se ha quedado sin tres hermosos ejemplares, tigres de Bengala, una especie que está en peligro de extinción y que tuvieron la mala suerte de nacer en España, donde apretar el gatillo es lo más fácil y rápido y donde la naturaleza siempre ha estado en el último punto de cualquier lista.
Así, mientras nosotros nos seguimos mirando el ombligo y nos convertimos en la especie más depredadora, la Naturaleza nos va dando lecciones, otra cosa es que la queramos escuchar.
Mientras seguimos anclados en otra época, buscando aún la piedra filosofal que convierta los metales en oro y la fuente de la eterna juventud, esta misma semana se ha conocido que una especie de medusa, turritopsis nutricula, un animal compuesto por agua en un 90%, podría ser el único animal inmortal del mundo. Igual que la salamandra es capaz, por un proceso llamado transdiferenciación, de regenerar órganos amputados, esta medusa es capaz de regenerar su cuerpo entero una y otra vez. Y estos son los seres irracionales del mundo animal.
Yo no sé si los antiguos filósofos tenían razón cuando hablaban de la reencarnación. No conozco a nadie que quiera o pueda hablar de vidas anteriores, pero si existiera, cada vez tengo más claro que no quiero volver a ser humana.

2 comentarios:

  1. En una ocasión Victor Hugo escribió:

    "Produce una inmensa tristeza pensar que la naturaleza habla mientras el género humano no escucha".

    Cuanta razón tiene el contenido de la frase ¿no te parece?

    Pilar Cardeña

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