miércoles, 31 de diciembre de 2014

5 MINUTOS ANTES DE LA CUENTA ATRÁS...

Pues sí, ya estamos a 31 de diciembre. Por si alguien aún no lo ha notado se acaba 2014 e inauguramos un año nuevo, el 2015, en el que todos tenemos esperanzas.
Esperanzas de que se cumplan nuestros sueños, de que se acabe la crisis, de que sigamos con salud, de que…, de que…, buenos propósitos y actitudes, porque tener malos propósitos es en sí mismo un despropósito y lo que queremos, o deberíamos querer, es mejorar nosotros e intentar mejorar la vida de  las personas que viven a nuestro alrededor.
A estas alturas ya del día, como dice la eterna canción, hacemos el balance de lo bueno y malo…pero yo no voy a hacer balance de lo malo, para qué hacerlo, para qué prolongar aquello que no nos ha servido para nada, para qué acordarnos de los momentos que hemos olvidado.
Mejor hacer balance de lo bueno, mejor revisar las fotografías de aquellos momentos que decidimos inmortalizar cuando ocurrían para que su recuerdo nos acompañara siempre. Y si lo hicimos, si decidimos sacar la cámara y apretar el disparador fue porque aquel momento era especial para nosotros, porque algo estaba sucediendo que nos estaba haciendo si no felices, cuanto menos sentirnos bien. Y ha sido haciendo justo eso, revisando las fotografías que han inmortalizado mi vida durante estos últimos 365 días que me doy cuenta de lo rápido que han pasado, de las muchas cosas que he vivido y de todas las sonrisas que provocaron en su día y que esta tarde de nuevo, he vuelto a repetir.
Un año con experiencias de todo tipo: las buenas inmejorables, las malas, algunas con resultado positivo y de las otras, ya no me acuerdo.
Y lo mejor de las fotografías es ver las personas que forman parte de ellas. Caras de ilusión, de felicidad, de ternura, de amistad, de cariño,…sentimientos profundos que hacen que me sienta feliz y un poco nostálgica. Que hacen que me acuerde de los que ya no están físicamente pero que siempre estarán en mi corazón y que seguro estarían felices de ver todas esas fotografías conmigo, de ver que el ángel que dejaron, lo está haciendo bien, muy bien.
Porque no me puedo quejar, sólo me queda dar las gracias al 2014 por todos esos buenos momentos y pedirle al año nuevo, por cumplir la tradición, que pueda seguir teniendo la suerte de contar con esa familia tan increíble y excepcional que tengo y con el cariño de tanta y tanta gente maravillosa, unos cerquita y otros más lejos, pero gente a la que quiero de verdad y no voy a nombrar porque no quiero cometer la injusticia de dejarme a nadie, ellos saben quiénes son, porque forman parte de mi vida. Con ellos todo es mucho más fácil y no hay nada que una buena charla, una conversación de wassap para los que no estamos en contacto diario, una coca-cola, un sopar al carrer, un café, un libro, un paseo, una llamada, un chiste….no pueda arreglar. Pequeños grandes momentos que pasan a engrosar la carpeta de las fotografías imborrables. Y por pedir un poco más,  me acuerdo de aquellos a los que quiero y que están más allá luchando por una libertad que confiemos algún día, y porque no 2015, les sea devuelta. Mi pensamiento siempre con ellos.

Y doy gracias por los momentos buenos que vendrán y por la fuerza para superar los otros. 
Feliz 2015.

martes, 16 de septiembre de 2014

VERGÜENZA EN TORDESILLAS

Si no lo digo reviento. Tradición le llaman. Asesinato lo llamo yo. Y es que no me cabe en la cabeza que a estas alturas se siga celebrando en TORDESILLAS (así en mayúsculas para su vergüenza) el maldito Toro de la Vega.
Tradición medieval. Qué listos ellos. Por la misma regla de tres imagino que su alcalde será un señor feudal al que le continuaran dando el excedente de sus cosechas y de la misma manera seguirán manteniendo el derecho de pernada…o ¿quizá eso ya no? ¿Es muy bestia? ¿Más que la estúpida tradición de matar a un toro con lanza? Quieren mantener tradiciones, pues que las mantengan todas!!
Y mientras asistimos con estupefacción un año más a este salvajismo desenfrenado. A una brutalidad incalificable.
Y yo me pregunto ¿A qué coño están esperando las autoridades a poner fin a esto? Existe una ley de protección animal que defiende sus derechos ¿Por qué no se aplica? ¿Esa es la imagen que queremos proyectar en Europa?
¿Por qué la policía carga contra los defensores de los animales si los asesinos estaban en el otro lado? ¿Reminiscencia de su pasado no muy lejano? ¿Tradición también?
Lo bueno es que hemos podido ver la cara del asesino. Campeón. Valiente. Esta noche puedes dormir a gusto. Hijo de la grandísima…no vales una mierda, ni tú ni los que son como tú. Ni los que te han aplaudido, no lo mereces, no mereces nada. No eres un héroe ni nada que se le parezca. Sólo eres un asesino.
Y me vais a disculpar pero este tema me da rabia, indignación, vergüenza y sobretodo asco, mucho asco.
¿Exagero? Pues no lo lamento, soy así y es lo que siento. Tengo un ratoncito que se ha colado en casa y no sé como cogerlo sin matarlo (aprovecho por si alguien me da una idea). Respeto lo llamo yo.
Y volviendo al toro de la Vega, igual a estos salvajes les da un día por coger las lanzas y matarse entre ellos, porque ese instinto de matar a sangre fría a un animal tan bello como un toro en este caso, se debe llevar en los genes y quien es capaz de hacerlo le da lo mismo tener delante un toro u otro ser, humano o no.
No hay derecho a lo que hacen, ni tradición ni leches. Evolución!! Que hace tiempo que dejamos de vivir en las cavernas, que inventamos el fuego, que nos invadieron los romanos, que pasó la Edad Media, el Renacimiento y la Edad Moderna.
Que estamos en el siglo de las tecnologías aunque estos paletos no se hayan enterado aún.
Ojala no tengamos que volver a ver esas imágenes en la tele. No les demos cobertura. No les visitemos hasta que no salgan de su caverna y sobretodo
NO AL MALTRATO ANIMAL!!

miércoles, 6 de agosto de 2014

POR QUE NO OTORGO

Mucho tiempo sin escribir en el blog. Quizá demasiado o quizá no. Un poco de desgana tal vez. Muchas cosas que decir y pocas maneras de decirlas para no salir de lo correcto. Me he dedicado a observar: a mi alrededor, un poco más allá y al mundo en general.  Un ejercicio por otro lado muy recomendable aunque psicológicamente agotador, por la decepción, por la pasividad, por todo.

Llevo días planteándome una cuestión a la que será difícil encontrar una respuesta. ¿Qué le está pasando a la humanidad en general? Hay mentira, crispación, hipocresía, mala educación... y a todo ello se le suma el cada vez menos valor de decir las cosas por su nombre. De hablarnos a la cara. Incluso nos discutimos por whatssap o peor aún por las redes sociales.

Y es que hemos perdido esa sana costumbre de mirarnos a los ojos. O quizá no lo hacemos a posta para no enfrentarnos con una realidad que nos nos va a gustar.

Hemos crecido en el derecho de decir lo que queramos, cuando y como queramos pero hemos perdido en la obligación de escuchar a los demás.

La televisión no ayuda demasiado, y demasiado es decir mucho. Corrupción, guerras, injusticias, están a la orden del día y las miramos impasibles....aunque quizá impasibles tampoco sea correcto. Cuando tomamos una postura, vamos a por ella a muerte. ¿Qué salen políticos corruptos? Pues todos los políticos son corruptos y eso se defiende a muerte. Aquello de que no hay que generalizar es cosa del pasado. Generalizamos y además con argumentos, sin importar que tengan o no sustento o que se nos acaben de ocurrir.

Y me resulta muy difícil entender esa facilidad para opinar, saber y condenar cualquier cosa sin levantar la vista del ordenador. Debe ser otra forma de concebir la vida que no me da ninguna credibilidad.

Que bien se ven los toros, al que le gusten, desde cualquier barrera ( o sofá)

A veces lanzamos preguntas sin querer escuchar la respuesta. Opinamos sin querer saber la opinión de la persona que tenemos delante. Decimos verdades a medias que se convierten en mentiras. Potenciamos la discusión, el desplante, el mal rollo. Con la vista aún en el ordenador. ¿Encontramos de verdad algún beneficio en eso? Ya no miramos por lo mucho o poco que pueda doler al que lee, al que oye, al que recibe o al que le cuentan. Obtenemos un cero en empatía. La hemos dejado morir.

Siempre he encontrado argumentos para mantener la esperanza, el optimismo y la verdad es que últimamente cada vez se me hace una tarea más difícil.

No hace mucho comentaba a gente de mi confianza que me siento amordazada. Con muchas cosas que decir pero sin saber como decirlas. Que irónico, ¿verdad? Defendemos una libertad que luego no  facilitamos a los demás, por los motivos que sean y por los  más variopintos que podamos imaginar.

Pues así me siento, coartada en mi libertad de expresión. Sin saber como decir las cosas. Mordiéndome la lengua para no molestar a los que me molestan. Una nueva ironia.

Y esto me esta llevando a un estado de introversión que no me gusta nada. A pensar que no sirve de nada hablar. También hace pocos días alguien de quien estoy aprendiendo cosas interesantes dijo que quien calla, a menudo no otorga, simplemente calla. Y eso es lo que estoy haciendo. Simplemente callar.

Pero algo en mi se resiste y no estoy dispuesta a que la situación general me arrastre. Por eso anhelo los días de vacaciones que están a punto de llegar y los he cargado de actividades, de páginas de lectura, de planes y sobretodo de ganas e ilusión, mucha ilusión. Quiero devolver a los míos ese tiempo robado del día a día y pagarles con risas mis silencios y mi mal humor porque mi alegría es su alegría. Espero que todo ello sirva para devolverme a mi estado natural, aceptando el hecho de que mi actitud sólo es un tanto por ciento de la circunstancia diaria y que el resto depende de las personas que ocupan mi espacio. Pero me he de acostumbrar a vivir con ese porcentaje.

Seguro que las vacaciones me ayudan a descargar esta mochila que cada vez se me hace más pesada.

Seguro que desde la distancia soy capaz de encontrar el remedio y volver con esa mochila vacia, es más, volver sin mochila que pueda llenarse.

Eso es lo que voy a hacer.

lunes, 28 de abril de 2014

LOS CINCO DE CANDELA

No lo voy a negar. Me tiene loquitamente enamorá. Mejor debería decir que nos tiene, porque no conozco a nadie de mi familia que no haya perdido el sentido con ella. Tiene muchas ganas de ser mayor y a veces nos hace dudar de si realmente lo es. Por sus expresiones, por su forma de hablar, por como se mueve, tan presumida, tan flamenca...pero claro, es que de casta le viene al galgo. En una familia con tanto duende y tanto arte, no podría haber salido con menos desparpajo y de eso la canija tiene un rato. No sé que nos ha hecho pero nos ha cambiado a todos, desde el primero hasta el último que es capaz de dejar a medias una partida en la consola por llevarla al parque a dar unos chutes con la pelota. Cada tarde,estamos deseando que entre por la puerta para ver que nos cuenta, con que humor viene o que tiene de nuevo para enseñarnos. Porque cada conversación con ella se convierte en un aprendizaje, bien sea una palabra, una conclusión, un gesto o una expresión. Y es que hoy mi niña, nuestra niña, cumple ya cinco añazos. Es increíble que tan poco tiempo pueda aportar tanto y aunque da pena ver como pasa el tiempo, también es verdad que, es toda una experiencia verla crecer y gratificante hacerlo con ella. Se enfada cuando nos reímos con ella por algo que nos cuenta y que nos hace gracia pero no lo podemos evitar y entonces saca a relucir ese genio contenido que tiene dentro y que de mayor, bien dominado, la va a llevar a donde ella quiera porque si algo tiene claro, es lo que quiere, puede cambiar y seguro que lo hace, pero la vehemencia en la defensa de lo que cree y la seguridad en lo que quiere es algo con lo que ha nacido. ¿Y la expresión de sus ojos? Le falta espacio en la cara cuando tiene que abrirlos para explicarnos algo que la ha sorprendido y sube las cejas hasta más allá de la frente y acompaña la expresión con gestos exagerados de sus manitas. ¿Y sus miradas? Esas miradas de soslayo o esa caída de ojos que nos vuelve locos. Esa expresión interesante que pone queriéndote decir que eso que le estás contando no le importa o que acabes pronto porque se ha cansado de escucharte. O esa otra expresión pícara cuando alguien ha dicho la palabrota y viene a chivarse, diciéndote bajito que es un secreto. y....y...y...y asi podría rellenar mil folios más y no acabaría nunca de explicar anécdotas y de reir con sus ocurrencias. Ojalá puedan pasar tantos años como para que te veamos convertida en eso que tan claro tienes que quieres ser. Maneras no te faltan. Carácter, tampoco. Muchas felicidades mi niña, a ti y a tus papas que tan bien están consiguiendo que seas una persona especial. El resto estaremos ahí para acompañarte

lunes, 27 de enero de 2014

LA LLAGOSTA, PURO TEATRO

Con una diferencia de pocas semanas hemos visto el centro cultural de la Llagosta lleno para ver dos funciones  de teatro.
La primera fue hace unas semanas a cargo del grupo JUMP. La más reciente, este pasado fin de semana, a cargo de los amigos de la cultura.
Las dos con estilos muy diferentes pero con muchos hechos en común como la voluntad, el esfuerzo y el cariño de todos los participantes de llevar a cabo un proyecto, sin olvidar que ninguno de ellos son profesionales, de manera totalmente altruista.
Y  puedo asegurar, porque lo he podido vivir, el esfuerzo que hay detrás de cada una de las obras. Horas y horas de ensayo y durante muchos meses para escribir, para aprenderse los papeles, para ensayar las obras y para que en definitiva todo salga perfecto el día del estreno.
Personas que podrían emplear su tiempo en otra cosa pero han decidido emplearlo en hacernos pasar un buen rato a los demás,  algo que es de agradecer en los tiempos que corren ya que nos permiten, por un rato,  olvidarnos de la realidad que nos rodea.
Hemos podido ver encima del escenario personas de todas las edades, desde niños hasta personas más mayores.
Imagino que para todos los actores, la recompensa final es ver el teatro lleno de gente y los aplausos al final de las representaciones. En ese caso los dos grupos pueden sentirse orgullosos de ello.
Hacía tiempo que, personalmente, no veía al conserje buscando asientos libres para acomodar a la gente que iba entrando y eso sucedió este sábado. Personas que esperaban fuera, sin entrada, con la esperanza de que quedara alguna butaca libre.
Y es que tenemos ganas de pasarlo bien. Tenemos ganas de olvidar los problemas diarios. Tenemos ganas de salir de casa y encontrarnos con amigos, vecinos y conocidos para pasar un buen rato.
Por eso no es raro que, al anunciar el fin de la función, tuviera que mirar el reloj porque me parecía mentira que se acabara ya y comprobé que el tiempo se me había pasado volando.
Por eso quiero felicitar desde aquí a los dos grupos y animarles. A  JUMP para que sigan con el nivel al que nos han acostumbrado. A los amigos de la cultura para que no se cansen de hacernos reír y sigan haciendo obras de proximidad, denunciando con ironía situaciones que nos tocan vivir cada día.
Para quien no haya tenido el placer de verlos, le recomiendo que no se pierda los próximos estrenos. Vale la pena.
Y antes de acabar, quiero destacar la realidad común más importante de los dos grupos y sus obras. Las dos han tenido lugar en nuestro centro cultural y sus componentes, no son actores famosos, ni profesionales, pero son de La Llagosta.

domingo, 19 de enero de 2014

EL PRECIO DE UN VOTO

No sé que pueda haber más importante que la libertad de las personas.  No se me ocurre nada que pueda sustituirla teniendo en cuenta que esa misma libertad nos dignifica.

Algunas reacciones me están dejando atónita a raíz de los últimos hechos acontecidos en el PSC, después de la última votación en el Parlament de Catalunya, en la que tres de sus diputados votaron a favor de pedir al Congreso la competencia para realizar consultas.
Yo misma, milito en un partido político, ICV, y puedo afirmar que jamás, nunc a, he votado en contra de mi propia decisión. No se ha dado el caso de discrepancias con mis compañeros en cuanto al sentido de un voto, pero de haber sucedido, estoy segura que no habría pasado nada.  Libertad de voto que se llama. Partido pachanga como lo califican otros.
Y es que yo creo que al militar en un partido entregas esfuerzo, trabajo, horas de dedicación pero en ningún lugar pone que debas entregar tu mente, que dejes de opinar o que simplemente te dejes llevar por lo que piensan otros sin cuestionamientos. No quiero dar a entender que dentro de mi partido, a nivel local, no hayamos tenido, tengamos y tendremos, discrepancias, las hay y muchas, porque cada uno es libre para dar su opinión pero no me cabe duda de que esas discusiones o debates, nos hacen grandes y nos enriquecen a cada uno.
Pero como digo eso es lo que yo creo.

Volviendo al PSC, diputados díscolos he escuchado que les decían hoy en las noticias y no he podido menos que sorprenderme. Los llaman así por haber roto ese término arcaico que es la disciplina de voto. Una disciplina en la que no te vale pensar o tener ideas porque otros ya las tienen por ti.
Y me van a perdonar, pero en el tiempo que hace que me dedico a esto de la política,  no he conocido aún a ningún político de manual, de ningún partido, sea cual sea su color  y creo que es definitivamente como debe ser.

De todo lo escuchado, lo que me ha encendido de verdad son las declaraciones del primer secretario del PSC,  Pere Navarro, emplazando a los tres diputados que votaron diferente a ser honrados y coherentes y renunciar a sus escaños….

¿¿Qué entiende el Sr. Navarro por honradez o coherencia?? Por si era yo la equivocada he ido a consultar la RAE.
Honradez: Rectitud de ánimo, integridad en el obrar.

Coherencia: Actitud lógica y consecuente con una posición anterior. Lo hago por coherencia con mis principios (Ejemplo literal del diccionario y que no podía ser más acorde)
Definitivamente el Sr. Navarro no ha utilizado el idioma correctamente.  Precisamente los tres diputados, si algo han sido es honrados y coherentes. Les piden la renuncia por haber pensado por ellos mismos, por haber ejercido la libertad para mantener sus principios y repito a día de hoy no me vale decir que por algo militan en un partido, no conozco políticos de manual.

 Y lo que me sorprende es la tranquilidad con la que hace estas manifestaciones y la absoluta normalidad que le da al asunto. ¿Es acaso esta la democracia que defiende y entiende el PSC? ¿Estás conmigo o contra mí? Sin duda, da para reflexionar mucho más allá del escrito en este blog.
Veremos cómo suceden los acontecimientos pero de momento mi apoyo desde aquí a Marina Geli, Joan Ignasi Elena y Núria Ventura por haber sabido imponer su criterio a la disciplina de cualquier partido aunque les cueste su militancia en el PSC, sus años de trabajo y sus dedicaciones, pero ¿de qué les va a servir si les van a tratar como simples números? Yo lo tendría claro.

Con estos hechos me pregunto cómo vamos a explicar a los ciudadanos que en los partidos impera la libertad. Lo peor es que el protagonista de esta historia sea un partido de izquierdas, ¿o no?