lunes, 27 de enero de 2014

LA LLAGOSTA, PURO TEATRO

Con una diferencia de pocas semanas hemos visto el centro cultural de la Llagosta lleno para ver dos funciones  de teatro.
La primera fue hace unas semanas a cargo del grupo JUMP. La más reciente, este pasado fin de semana, a cargo de los amigos de la cultura.
Las dos con estilos muy diferentes pero con muchos hechos en común como la voluntad, el esfuerzo y el cariño de todos los participantes de llevar a cabo un proyecto, sin olvidar que ninguno de ellos son profesionales, de manera totalmente altruista.
Y  puedo asegurar, porque lo he podido vivir, el esfuerzo que hay detrás de cada una de las obras. Horas y horas de ensayo y durante muchos meses para escribir, para aprenderse los papeles, para ensayar las obras y para que en definitiva todo salga perfecto el día del estreno.
Personas que podrían emplear su tiempo en otra cosa pero han decidido emplearlo en hacernos pasar un buen rato a los demás,  algo que es de agradecer en los tiempos que corren ya que nos permiten, por un rato,  olvidarnos de la realidad que nos rodea.
Hemos podido ver encima del escenario personas de todas las edades, desde niños hasta personas más mayores.
Imagino que para todos los actores, la recompensa final es ver el teatro lleno de gente y los aplausos al final de las representaciones. En ese caso los dos grupos pueden sentirse orgullosos de ello.
Hacía tiempo que, personalmente, no veía al conserje buscando asientos libres para acomodar a la gente que iba entrando y eso sucedió este sábado. Personas que esperaban fuera, sin entrada, con la esperanza de que quedara alguna butaca libre.
Y es que tenemos ganas de pasarlo bien. Tenemos ganas de olvidar los problemas diarios. Tenemos ganas de salir de casa y encontrarnos con amigos, vecinos y conocidos para pasar un buen rato.
Por eso no es raro que, al anunciar el fin de la función, tuviera que mirar el reloj porque me parecía mentira que se acabara ya y comprobé que el tiempo se me había pasado volando.
Por eso quiero felicitar desde aquí a los dos grupos y animarles. A  JUMP para que sigan con el nivel al que nos han acostumbrado. A los amigos de la cultura para que no se cansen de hacernos reír y sigan haciendo obras de proximidad, denunciando con ironía situaciones que nos tocan vivir cada día.
Para quien no haya tenido el placer de verlos, le recomiendo que no se pierda los próximos estrenos. Vale la pena.
Y antes de acabar, quiero destacar la realidad común más importante de los dos grupos y sus obras. Las dos han tenido lugar en nuestro centro cultural y sus componentes, no son actores famosos, ni profesionales, pero son de La Llagosta.

domingo, 19 de enero de 2014

EL PRECIO DE UN VOTO

No sé que pueda haber más importante que la libertad de las personas.  No se me ocurre nada que pueda sustituirla teniendo en cuenta que esa misma libertad nos dignifica.

Algunas reacciones me están dejando atónita a raíz de los últimos hechos acontecidos en el PSC, después de la última votación en el Parlament de Catalunya, en la que tres de sus diputados votaron a favor de pedir al Congreso la competencia para realizar consultas.
Yo misma, milito en un partido político, ICV, y puedo afirmar que jamás, nunc a, he votado en contra de mi propia decisión. No se ha dado el caso de discrepancias con mis compañeros en cuanto al sentido de un voto, pero de haber sucedido, estoy segura que no habría pasado nada.  Libertad de voto que se llama. Partido pachanga como lo califican otros.
Y es que yo creo que al militar en un partido entregas esfuerzo, trabajo, horas de dedicación pero en ningún lugar pone que debas entregar tu mente, que dejes de opinar o que simplemente te dejes llevar por lo que piensan otros sin cuestionamientos. No quiero dar a entender que dentro de mi partido, a nivel local, no hayamos tenido, tengamos y tendremos, discrepancias, las hay y muchas, porque cada uno es libre para dar su opinión pero no me cabe duda de que esas discusiones o debates, nos hacen grandes y nos enriquecen a cada uno.
Pero como digo eso es lo que yo creo.

Volviendo al PSC, diputados díscolos he escuchado que les decían hoy en las noticias y no he podido menos que sorprenderme. Los llaman así por haber roto ese término arcaico que es la disciplina de voto. Una disciplina en la que no te vale pensar o tener ideas porque otros ya las tienen por ti.
Y me van a perdonar, pero en el tiempo que hace que me dedico a esto de la política,  no he conocido aún a ningún político de manual, de ningún partido, sea cual sea su color  y creo que es definitivamente como debe ser.

De todo lo escuchado, lo que me ha encendido de verdad son las declaraciones del primer secretario del PSC,  Pere Navarro, emplazando a los tres diputados que votaron diferente a ser honrados y coherentes y renunciar a sus escaños….

¿¿Qué entiende el Sr. Navarro por honradez o coherencia?? Por si era yo la equivocada he ido a consultar la RAE.
Honradez: Rectitud de ánimo, integridad en el obrar.

Coherencia: Actitud lógica y consecuente con una posición anterior. Lo hago por coherencia con mis principios (Ejemplo literal del diccionario y que no podía ser más acorde)
Definitivamente el Sr. Navarro no ha utilizado el idioma correctamente.  Precisamente los tres diputados, si algo han sido es honrados y coherentes. Les piden la renuncia por haber pensado por ellos mismos, por haber ejercido la libertad para mantener sus principios y repito a día de hoy no me vale decir que por algo militan en un partido, no conozco políticos de manual.

 Y lo que me sorprende es la tranquilidad con la que hace estas manifestaciones y la absoluta normalidad que le da al asunto. ¿Es acaso esta la democracia que defiende y entiende el PSC? ¿Estás conmigo o contra mí? Sin duda, da para reflexionar mucho más allá del escrito en este blog.
Veremos cómo suceden los acontecimientos pero de momento mi apoyo desde aquí a Marina Geli, Joan Ignasi Elena y Núria Ventura por haber sabido imponer su criterio a la disciplina de cualquier partido aunque les cueste su militancia en el PSC, sus años de trabajo y sus dedicaciones, pero ¿de qué les va a servir si les van a tratar como simples números? Yo lo tendría claro.

Con estos hechos me pregunto cómo vamos a explicar a los ciudadanos que en los partidos impera la libertad. Lo peor es que el protagonista de esta historia sea un partido de izquierdas, ¿o no?