Acabamos de recibir en España a la que es la mujer con más poder en Europa, la canciller alemana, Angela Merkel. Una visita que ha levantado no pocas expectativas y esperanzas. Parecía que esta visita iba a solucionar todos los problemas que sufre este país.
La mandataria alemana, junto con sus no pocos compatriotas que la acompañaron, estuvo durante 6 horas examinando nuestras cuentas y parece que salió satisfecha…por lo menos se aseguró de que vamos a devolver lo que nos han “prestado”.
De cualquiera manera tener el visto bueno de un país como Alemania, es algo como mínimo alentador y sobretodo tranquiliza el saber que nuestra situación está lejos de la de Irlanda o Grecia.
¿Entonces por qué no me produce esperanza oír justo después de la partida del séquito alemán las declaraciones del gobierno?
Sencillamente porque no me creo lo que dicen. Es cierto que es necesario hacer algo, y que si todos debemos apretarnos el cinturón, nos lo apretemos, pero todos.
Una vez alguien me dijo que era irresponsable no estar de acuerdo con atrasar la edad de jubilación a los 67 años. Imagino que son puntos de vista.
De momento, no me convencen los argumentos del gobierno de que esta reforma es buena para todos. Si, sobre todo para ellos, que no renuncian a sus sueldos vitalicios, a sus numerosos asesores, a sus numerosos privilegios y a sus elevados sueldos.
De un presidente de gobierno se espera responsabilidad, esa responsabilidad de la que tanto se llenan la boca pero que ellos no demuestran.
Por eso, no me creo al Sr. Blanco. Su papel ya ha quedado obsoleto y su discurso está ya muy manido.
España empezará a ir bien cuando los que intentan vendernos que la solución del problema que atraviesa el país pasa por que los trabajadores de a pie suframos recortes sociales, congelación de sueldos y pérdida de privilegios, empiecen dando ejemplo y enumeren los beneficios a los que ellos están dispuestos a renunciar. Seguro que de ahí podemos ahorrar un buen pico. Espero también que la vena reformista del presidente Rodríguez, como la definió el vicepresidente de la patronal, tome otro rumbo y apunte en otra dirección.
Y la próxima vez que recibamos la auditoria de otro país de Europa, llámenla por su nombre y no nos la disfracen de visita turística, no se peleen por ver quién sale en la foto al lado del auditor.
La mandataria alemana, junto con sus no pocos compatriotas que la acompañaron, estuvo durante 6 horas examinando nuestras cuentas y parece que salió satisfecha…por lo menos se aseguró de que vamos a devolver lo que nos han “prestado”.
De cualquiera manera tener el visto bueno de un país como Alemania, es algo como mínimo alentador y sobretodo tranquiliza el saber que nuestra situación está lejos de la de Irlanda o Grecia.
¿Entonces por qué no me produce esperanza oír justo después de la partida del séquito alemán las declaraciones del gobierno?
Sencillamente porque no me creo lo que dicen. Es cierto que es necesario hacer algo, y que si todos debemos apretarnos el cinturón, nos lo apretemos, pero todos.
Una vez alguien me dijo que era irresponsable no estar de acuerdo con atrasar la edad de jubilación a los 67 años. Imagino que son puntos de vista.
De momento, no me convencen los argumentos del gobierno de que esta reforma es buena para todos. Si, sobre todo para ellos, que no renuncian a sus sueldos vitalicios, a sus numerosos asesores, a sus numerosos privilegios y a sus elevados sueldos.
De un presidente de gobierno se espera responsabilidad, esa responsabilidad de la que tanto se llenan la boca pero que ellos no demuestran.
Por eso, no me creo al Sr. Blanco. Su papel ya ha quedado obsoleto y su discurso está ya muy manido.
España empezará a ir bien cuando los que intentan vendernos que la solución del problema que atraviesa el país pasa por que los trabajadores de a pie suframos recortes sociales, congelación de sueldos y pérdida de privilegios, empiecen dando ejemplo y enumeren los beneficios a los que ellos están dispuestos a renunciar. Seguro que de ahí podemos ahorrar un buen pico. Espero también que la vena reformista del presidente Rodríguez, como la definió el vicepresidente de la patronal, tome otro rumbo y apunte en otra dirección.
Y la próxima vez que recibamos la auditoria de otro país de Europa, llámenla por su nombre y no nos la disfracen de visita turística, no se peleen por ver quién sale en la foto al lado del auditor.
El sr. Zapatero ya ha dicho que no piensa renunciar al sueldo de 80000 € que les queda a los ex-presidente, esta claro que le queda poco en el convento y se ca... dentro.
ResponderEliminarUn buen padre seimpre dice a sus hijos que han de ser consecuentes con aquello que dicen, han de dar ejemplo, pero ya sabe que despues le quedara una pension de lujo ( como la que esta dejando a la mayoria de españoles ).
Seguro que en poco tiempo podrá estar de asesor del sr. Botín, o de otro de sus amigos banqueros, como hacen el sr.Aznar o el sr. Gonzalez.
Por cierto fijemosnos en la similitud de las medias verdades del sr. Gonzalez sobre la OTAN " de entrada no" y la campaña de las pensiones del tandem CCOO-UGT "Así NO", al final nos terminan engañando a todos.
Durante el proceso de aprobacion de la reforma laboral algunos dirigentes del PSXE ( quito la O de Obrero porque no la merecen, quizas habria que poner la B, de Botin o de Banquero ), decia que concejales y dirigentes socialistas con carnet de UGT no tenian claro donde posicionarse, si como trabajador con UGT o como politico con el PSXE. Fue al menos curioso ver en la Huelga general al que despues és el ministro del Paro ( con carnet del PSXE y de UGT )
ResponderEliminarPues bien despues de lo que ha ocurrido con el vergonzoso pacto de las pensiones me gustaria saber como se posicionan politicos de ICV-EuA afiliados a CCOO, se produce algo similar a lo que les pasa a los del PSXE no estaria de mas que alguien nos lo explicara, para saber por donde van ( ya sabemos que IU exculpa a CCOO-UGT del pacto y culpa a PSXE-CEOE ) aunque lo han firmado todos.
¿ Contradiciones de la politica ?
habria que poner aquella cancion que habla del "corazon partio"
Muy buena pregunta querido anónimo. Y con permiso de Marta aprovecho este blog para hacer terapia sobre mi doble militancia, ICV y CC.OO.
ResponderEliminarComo trabajador, persona de izquierdas y defensor de los servicios públicos no estoy de acuerdo con la reforma de las pensiones. Eso me hace estar en contra de lo que ha firmado mi sindicato pero eso no debe hacer que me cuestione mi afiliación. Si estoy afiliado no es porque mi sindicato firmara un gran acuerdo en el 1995 (cuando me afilié) sino que me afilié porque creo que los trabajadores de este pais, como el de cualquier otro, deben estar unidos ante los ataques de la patronal. La afiliación a un sindicato o a un partido político no debe responder a causas puntuales. Como tampoco debe responder a lo mismo el abandono de la afiliación. De hecho, creo que el debate interno es lo que llevará a cualquier organización al enriquecimiento de puntos de vista, evitando su deriva hacia los extremos, generalmente a la derecha.
Precisamente por eso estoy en ICV y CC.OO porque permiten una gran dosis de crítica interna. Y si un día no estoy de acuerdo con la decisión de los responsables puedo decirlo públicamente y no pasa nada. Más tarde se expone en los órganos de decisión de cada organización y se actua en función de lo que piensa la mayoría. Eso es lo que hace ricas, ideológicamente hablando, a estas organizaciones.
Me gustaría que todos los que tiene vocación de servicio público, y me refiero a sindicatos y organizaciones políticas, pudieran decir lo mismo.
Además en la Llagosta nosotros sí nos hemos posicionado claramente en contra de la reforma.
Gracias
Seguro que todos los que seguimos la politica local, y en el caso de las pensiones la nacional, agradecemos tu sinceridad y tambien tu espiritu critico con aquellas decisiones con las que no estas de acuerdo.
ResponderEliminarPor suerte aún nos quedan los tonos grises, otros continuan con el o estas conmigo o estas contra mí, o todo negro o todo blanco, y en los matices es donde se encuentra la diversidad, de ideas, de opiniones, donde se puede construir entre todos y no destruir al otro.
Gracias por la respuesta y suerte.