domingo, 31 de mayo de 2009

SOBRE SERES HUMANOS, VIVOS Y OTRAS ESPECIES

Para decir la verdad me he ido resistiendo a volver a escribir sobre ella pero la tentación se ha hecho demasiado grande. Y me da rabia.
Me estoy refiriendo, como no, a la ministra de igualdad o desigualdad como mejor debería decirse por que con sus ideas lo único que consigue es marcar diferencias.
En sus últimas declaraciones sobre la ley del aborto, tema que daría para tres escritos más, he llegado incluso a pensar que se trata de algo planeado para desviar la atención sobre la situación real que atraviesa España.
En los últimos días, las portadas de los periódicos y las tertulias de la radio se llenan con sus declaraciones, pasando los ERE de unas empresas y los cierres de otras a segundo plano.
Parece increíble que una sola persona sea capaz de tanto despropósito en tan poco espacio de tiempo. Cada vez que esta señora abre la boca es para decir una más gorda.
La ultimísima es de la de declarar que un feto humano, no es un ser humano...cuidado señoras que pueden creerse embarazadas de un niño y al final resultar ser un rodaballo, que también es un ser vivo, o no? Aunque para salir de dudas habrá que preguntar a la ministra o a la vicepresidenta que últimamente la acompaña en sus declaraciones (¿por qué?).
La culpa no debe ser solo de ella sola. Como ministra que es, seguramente cuenta con un equipo de asesores que la guían en sus declaraciones. Si es así, yo iría pensando en cambiarlos por que sin duda trabajan en su contra.
Hay quien basa sus declaraciones en la formación científica de esta señora, ¿alguien puede decirme cual es esa formación? ¿Con que criterio científico habla de este tema? Desde su cargo puede tener a su disposición a cualquier experto en todos los temas. Dudo que en este caso haya realizado alguna consulta.
Muchos cuestionaban la necesidad de este ministerio y tal como se dan las cosas, no les falta razón. Años han sido necesarios para que la mujer se introdujera con pleno derecho en el mundo laboral y aún hoy se nos siguen vetando algunos puestos de alto mando solo por ser mujeres.
No puede ser que las reivindicaciones de la mujer se conviertan en hazmerreír solo por las intervenciones de esta señora y el grupo de feministas que la rodea.
Sigo con el sentimiento cada vez más claro de que esta señora no me representa, ni quiero que lo haga. Agradecería que a partir de ahora, en sus declaraciones, no volviera a hablar en nombre de todas las mujeres de España, que lo haga en el suyo y en el de sus amigas. Yo, afortunadamente, tengo mi propio criterio y opinión y no necesito que alguien como ella me represente. Por el bien de todas las mujeres sería necesario que alguien con más criterio que ella le aconsejara bien, antes de que nos convierta a las mujeres en alguna especie aún por descubrir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario