O por lo menos me lo quiero creer. Que por fin después de 43 años y más de 800 asesinatos, ETA cese definitivamente las armas, tal y como ha anunciado esta semana.
Entiendo que para las víctimas del terrorismo, este anuncio haya sido descafeinado, no se lo crean o no tengan bastante. Yo seguramente tampoco lo tendría. No puedo entender el alcance de su dolor, ni tan siquiera imaginar el alcance de su odio.
Entiendo que hubieran deseado por lo menos que los miembros de ETA, hubieran pedido perdón y hubieran lamentado tantas muertes como hiciera el ejército republicano irlandés, el IRA, allá por el 2002. Aunque eso no les cambiaría en nada la pérdida del ser querido, del amigo o del compañero.
No entiendo en cambio la postura de algunos periodistas y políticos generadores de opinión. No entiendo que les provoquen y cuestiones el método de anunciar su rendición. Que si lo han hecho como cobardes a cara tapada, que si no confían en la palabra de asesinos (ante este argumento no entiendo quien debería entonces haberlo anunciado sino ellos mismos…), que si….¿Y qué más nos da cómo lo hayan hecho? El caso es que lo han hecho y ¿no es algo con lo que llevábamos soñando muchos años? Pues ya está no le demos más vueltas ni especulemos con la manera en que podría haber sido y no ha sido.
Personalmente, como ciudadana que ha vivido con horror e indignación cada acción de estos terroristas, esta ha sido una buena, una muy buena noticia. Poder celebrar que por fin tantas y tantas personas no tengan que mirar debajo de sus coches cada vez que quieran desplazarse. No tener que mirar de reojo para ver si se les acerca alguien por detrás con la intención de darle un tiro en la nuca. No tener que cambiar su rutina cada dos por tres para evitar que sus movimientos sean estudiados.
Poder celebrar que por fin todos nos hemos librado de una lacra que llevamos años sufriendo.
Así que yo sí lo celebro y por eso quiero que quede grabado como una fecha histórica en mi blog que el día 20 de octubre de 2011, la banda terrorista ETA anunció el cese definitivo de su movimiento armado.
Gora Euskadi!
Entiendo que para las víctimas del terrorismo, este anuncio haya sido descafeinado, no se lo crean o no tengan bastante. Yo seguramente tampoco lo tendría. No puedo entender el alcance de su dolor, ni tan siquiera imaginar el alcance de su odio.
Entiendo que hubieran deseado por lo menos que los miembros de ETA, hubieran pedido perdón y hubieran lamentado tantas muertes como hiciera el ejército republicano irlandés, el IRA, allá por el 2002. Aunque eso no les cambiaría en nada la pérdida del ser querido, del amigo o del compañero.
No entiendo en cambio la postura de algunos periodistas y políticos generadores de opinión. No entiendo que les provoquen y cuestiones el método de anunciar su rendición. Que si lo han hecho como cobardes a cara tapada, que si no confían en la palabra de asesinos (ante este argumento no entiendo quien debería entonces haberlo anunciado sino ellos mismos…), que si….¿Y qué más nos da cómo lo hayan hecho? El caso es que lo han hecho y ¿no es algo con lo que llevábamos soñando muchos años? Pues ya está no le demos más vueltas ni especulemos con la manera en que podría haber sido y no ha sido.
Personalmente, como ciudadana que ha vivido con horror e indignación cada acción de estos terroristas, esta ha sido una buena, una muy buena noticia. Poder celebrar que por fin tantas y tantas personas no tengan que mirar debajo de sus coches cada vez que quieran desplazarse. No tener que mirar de reojo para ver si se les acerca alguien por detrás con la intención de darle un tiro en la nuca. No tener que cambiar su rutina cada dos por tres para evitar que sus movimientos sean estudiados.
Poder celebrar que por fin todos nos hemos librado de una lacra que llevamos años sufriendo.
Así que yo sí lo celebro y por eso quiero que quede grabado como una fecha histórica en mi blog que el día 20 de octubre de 2011, la banda terrorista ETA anunció el cese definitivo de su movimiento armado.
Gora Euskadi!
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